Una casa para mirar hacia el techo

Se trata de un proyecto sencillo en el que los detalles lo son todo, como la losa de casetones aparentes, un recurso no muy usual en viviendas.

El proyecto residencial Cereza20 propone un programa arquitectónico versátil para una pareja adulta, en el cual la vivienda pueda ser habitada en su totalidad o limitar en un futuro su uso a la primera planta, dependiendo de las condiciones de los usuarios.

El programa que consta de 220 metros cuadrados —en un lote de 216— se encuentra rodeado de casas y edificios que limitan las vistas y entrada de iluminación; es por esto que el proyecto propone un patio interior alargado e integrado al interior de la casa.
El espacio central de la casa es la doble altura que engloba el vestíbulo y estancia con vista al patio interior alargado, limitados por un muro acristalado por el cual se obtiene iluminación natural, ventilación y se generan espacios de calidad interior/ exterior al abrirlo.

Una pared de ladrillo aparente es el telón de fondo de la estancia; éste se eleva hasta llegar a la losa encasetonada. En un proyecto monocromático, el tono anaranjado del ladrillo da mucha luz y vitalidad al espacio central.
El patio no limita su vocación únicamente para contemplar, sino que permite circulaciones a través de este entre la recámara secundaria, el estudio y el área social.

La segunda planta se integra a la doble altura con el propósito de dotarla de una amplia calidad visual y las cualidades de iluminación y ventilación que brinda el patio.

Destaca el detalle de una escalera de huellas fabricadas de concreto y en cantiliver; uno de los escalones cambia de tono y material, madera, para hacer juego con la columna de apoyo en el comedor.

 

Fuente: www.noticias.arq.com.mx