La cúpula del Louvre Abu Dabi: hazaña de ingeniería
Jean Nouvel pidió a los ingenieros una cúpula suspendida: el resultado es espectacular.
Gracias a las fotografías de Luc Boegly y Sergio Grazia se puede apreciar el reto que significó la gran cúpula suspendida del Louvre Abu Dhabi, obra del arquitecto francés Jean Nouvel.
BuroHappold Engineering fue la consultora internacional de ingeniería responsable de darle sustento al deseo de Jean Nouvel.
Esta empresa cuenta con representaciones en 23 ciudades alrededor del mundo, más de 50 socios y 1,800 empleados, incluidos algunos de los mejores ingenieros consultores del mundo.
En 2007, Nouvel les compartió su visón sobre una enorme galería de arte jamás vista.
Nouvel había imaginado un zoco tradicional de Medio Oriente en las aguas del Golfo Pérsico, con un conjunto de edificios en su interior.
Todo debajo de una cúpula flotante.
Andy Pottinger, director asociado de Buro Happold e ingeniero estructural principal del proyecto contó lo siguiente sobre las primeras reuniones con el arquitecto:
“A menudo, como ingenieros, nos reímos cuando nos piden que hagamos que las cosas floten, pero en este caso lo tomamos muy, muy en serio, y realmente tratamos de hacerlo parecer como algo que está anclado en la parte superior de los edificios”.
Además, Nouvel pretendía crear una lluvia de luz que se filtraría a través de la cúpula hacia las plazas y galerías.
“La luz era como un material para nosotros que tuvimos que facilitar”, explicó Pottinger.
Como Nouvel no quería una solución tradicional para la cúpula, ésta se apoya en cuatro soportes.
“Los soportes están a 110 metros de distancia y forman un cuadrado debajo del círculo de la cúpula cuando lo miras según el plan. Eso fue vital porque eso trajo simetría a la ecuación”, dijo Pottinger.
“Al principio, para ser honesto, mucho de lo que estábamos haciendo no tuvo éxito. Creábamos enfoques de tipo geodésico, con triángulos formando la cúpula, o enfoques ortogonales, donde tenías una cuadrícula cuadrada”, agregó. “Nada de eso estaba funcionando, pues chocaba con el patrón base que Nouvel quería expresar”.
No fue sino hasta el prototipo 23 que los ingenieros empezaron a hallar la respuesta correcta.
El resultado fue capas de revestimiento de acero con forma de tesela, sin una línea recta de más de 10 metros. Las iteraciones del patrón también podrían lograr la visión de iluminación de Nouvel al alterar la estratificación del patrón en diferentes puntos del domo.
Así, tras varios modelos que se rompían, los ingenieros después se dedicaron a cumplir las normas ambientales al construir una galería en la isla artificial de Saadiyat, con un clima desértico cálido y en una zona de terremotos.
En prevención de terremotos, cada uno de los cuatro soportes de la cúpula tiene cojinetes esféricos de superficie curva que permiten que la estructura se mueva debajo del domo mientras la tierra se mueve mientras la estructura aislada permanece inmóvil.
Los cojinetes también permiten que la estructura de acero del domo tolere el cambio de temperatura de los días calurosos bajo el sol del desierto a las noches más frías.
“Lo que también hacen es permitir que la cúpula respire dentro y fuera, como lo llamamos”, dijo Pottinger. “Las fuerzas de temperatura son casi imposibles de resistir, pero lo que estos cojinetes de deslizamiento le permiten hacer es expandirse en unos 180 milímetros durante el día y luego encogerse durante la noche”.
Pocas estructuras en el mundo se han construido sobre agua en tierras recuperadas, y aún con valiosas colecciones de arte. Para incorporar agua en el diseño, Buro Happald buscó inspiración en lugares como Venecia.
“En un mundo ideal como ingenieros, querríamos mantener el perímetro del edificio lo más simple posible para prevenir la contracción y el agrietamiento que puede causar una entrada de agua”.
“Pero nuevamente tuvimos que aceptar el hecho de que Jean Nouvel quería que fuera como un zoco árabe en el agua, y eso significa que el agua debía entrar”.
“Una de las cosas más importantes que teníamos que hacer era encontrar la simplicidad entre la complejidad. Si no lo hiciéramos, no sería edificable”.
Por ello, el Louvre de Abu Dabi es una obra maestra de la ingeniería moderna.